Siempre lo mismo?, ¿más de lo común?, ¿siento que puedo ofrecer mucho más?, ¿le temo al cambio?, ¿estoy estable, pero estancando?… ¡CUIDADO, puedes estar atrapado en “tu zona de confort”!
¿Qué es?
Tu zona de confort representa un estado mental y de comportamiento donde te desenvuelves con neutralidad, obteniendo un nivel constante de rendimiento; sin sentido del riesgo o mejoramiento continuo, haciendo siempre lo mismo y del mismo modo (piloto automático activado).
En la actualidad, estamos acostumbrados a los hábitos y los estilos de vida que hasta cierto punto limitan o restringen nuestras posibilidades de evolucionar y convertirnos en los profesionales que nos gustaría ser.
¿Cómo sé si estoy en mi zona de confort?
Los signos que pueden indicar la necesidad de emprender una aventura de índole profesional o personal y dejar tu zona de confort son:
- No hay crecimiento emocional ni intelectual, lo cual genera apatía y desinterés.
- Predomina la desmotivación, no hay ánimo para comenzar proyectos o emprender planes nuevos.
- Bloqueo de ideas innovadoras, ya que estas no encajan con tu sistema estructurado de creencias.
- Temor a asumir riesgos, por lo que desaprovechas oportunidades de crecimiento, debido a la supuesta probabilidad de perder más que ganar.
- Imperan las excusas, el conformismo y en determinados casos la mediocridad.
- Se establece una rutina rígida, sin desafíos, cambios, sorpresas o imprevistos.
- Sentimiento de aislamiento y monotonía; aunque, hay estabilidad y sensación de control no hay nada estimulante en el día a día.
- El aprendizaje suele ser poco o nulo; se evidencia estancamiento y un gran vacío, donde la tristeza y la soledad pueden predominar.
- Existe un deseo reprimido de aventura, el cual se caracteriza por frases como: “quisiera”, “me gustaría”, “quizás lo intente” o “vamos a ver”.
- Procrastinación, postergación o hábito de retrasar ciertas actividades; lo cual indica que lo que estás haciendo no genera pasión.
- Negación constante a las propuestas que implican un cambio en tu rutina o manera de hacer las cosas.
Para reflexionar…
En odontología, al dejar de hacer siempre lo mismo y atreverse a aprender un idioma, estudiar, investigar, practicar nuevos protocolos clínicos, realizar de manera distinta un procedimiento, intentar con proyectos innovadores (fotografía, dibujo, diseño, etc.) o relacionarse con otros profesionales, son métodos para retar o desafiar tu zona de confort. De esta forma, al dejar el conformismo, la estabilidad, el excesivo control y la certidumbre, se fomenta el desarrollo, la flexibilidad y la reinvención personal-profesional.
“Si estamos creciendo, siempre estaremos fuera de nuestra zona de comodidad”. John Maxwell
